Mi nombre es Zonia, enamorada de la moda desde muy pequeña y apasionada de crear piezas únicas.
Mis recuerdos con la moda se remontan a cuando tenía 6 años y a una muñeca de maíz que siempre estaba junto a mi. Con los retales de tela que mi madre dejaba por casa y las sábanas que ya no podían ser aprovechadas, me dedicaba a estilizar a mi muñeca. Además, éramos una familia proveniente del campo por lo que teníamos vacas y estas se comían las sábanas que teníamos tendidas, dejándolas como un colador, y ahí estaba yo para aprovechar esa tela. Un día mi hermano me robó esa muñeca y la enterró en el jardín, al estar hecha de maíz, brotó una planta del suelo con la forma de mi muñeca. Y ese es uno de mis primeros recuerdos con la confección.
Poco a poco fui creciendo y mi sueño de confeccionar y crear moda pasaron de mi muñeca a modelos reales. a los 12 años y con un poco de ayuda, hice mi primer vestido. A los 18 años y sin ningún tipo de formación, empecé a hacer diseños para otras personas, algo que salía bien por mi empeño, afición y entrega.
Empecé a trabajar como costurera en diversos establecimientos y fábricas textiles. Después de poner empeño en aprender de todo en esta industria, decidí venir a vivir a España.
Empecé a trabajar en una tienda de arreglos hasta que, motivada por los clientes y su confianza en mi trabajo, en 2014 pude cumplir uno de mis sueños y abrí mi propia tienda ‘El Dedal de Plata‘ en Madrid.